Vacaciones sin riesgos. Se dispara el interés por la contratación de seguros de viaje

El fin del estado de alarma por la COVID-19, el avance de la vacunación y la relajación de las medidas que restringen la movilidad han aumentado la contratación de viajes y despertado el interés de los viajeros por incluir un seguro adecuado con el fin de evitar riesgos.

Hace poco más de un año buena parte de los turistas no consideraban imprescindible en sus desplazamientos la contratación de pólizas de viaje, a excepción de los trayectos a destinos muy lejanos o que incluían actividades que hicieran recomendable contar con una protección extra. Con la pandemia esta percepción ha cambiado y ahora la mayoría cree imprescindible contar con un buen seguro en la maleta. La COVID-19 ha establecido un antes y un después en la forma de viajar. Ha originado nuevas necesidades y los viajeros en estos momentos demandan inmediatez, accesibilidad y, sobre todo, seguridad y protección.

La última edición del Barómetro de Vacaciones Ipsos destaca el creciente interés por los seguros de viajes. Entre sus conclusiones, el estudio señala que el 49% de los españoles tiene intención de contratar uno para este verano. Las coberturas más valoradas son los gastos médicos y hospitalarios de urgencia, para el 83% de los españoles; el extravío o daño del equipaje y efectos personales (81%); y el retraso del viaje y cancelaciones (77%). El barómetro indica incluso que el 81% de los viajeros nacionales estaría dispuesto a pagar más por al menos un servicio adicional relacionado con la COVID-19. Desde el anuncio de la reactivación del turismo, los datos de las principales aseguradoras señalan que se han contratado hasta un 200% más de pólizas que en el mismo periodo de 2019.

Percepción del riesgo.

La COVID-19, que tantas cosas ha trastocado, también ha influido en la percepción de riesgo del viajero. Los desplazamientos pueden suponer, si no se toman las precauciones adecuadas, muchos quebraderos de cabeza. Por ejemplo, un confinamiento obligatorio en el lugar de vacaciones o el bloqueo en un aeropuerto por el cierre de fronteras, lo que conlleva gastos por prolongación de estancia.

El reciente informe El Futuro del Viaje: hábitos y preferencias del consumidor revela que las dudas y temores a la hora de viajar tras la pandemia se resumen en seis supuestos: enfermar, tener un accidente, dar positivo en COVID-19, no saber a qué hospital o clínica acudir y perder el equipaje o la documentación. El 79% de los encuestados para el estudio teme que la tasa de incidencia de contagios en el lugar de destino sea alta. Además, al 76,3% les preocupa guardar una cuarentena al volver, y al 39,5% que se le obligue a hacerse una prueba PCR. Sumado a esto, el 67% no viajará si no está vacunado.

¿Qué nos ofrece el seguro de viajes para este verano?

El virus sigue presente y lo prudente es tomar precauciones. Los seguros de viaje se han adaptado con rapidez a la nueva situación y ahora incluyen múltiples coberturas para dar respuesta a las nuevas necesidades derivadas de la crisis sanitaria. Contratar un seguro de viaje este verano ofrece tranquilidad ante cualquier eventualidad relacionada con la pandemia. Entre ellas: gastos de anulación de viaje por positivo en COVID-19; pruebas diagnósticas PCR; asistencia médica, hospitalización y trasporte de retorno; gastos por cuarentena y prolongación de estancia en destino. Estas pólizas además son productos económicos, es posible contratarlos desde 30-40 euros por asegurado, dependiendo de las coberturas que se quieran incluir. El coste de un seguro que incluye las medidas COVID es ligeramente superior –alrededor del 10%– al de un seguro de viaje tradicional, pero también incluye nuevas coberturas sanitarias.

A la hora de contratar un seguro de viaje hay que tener en cuenta que no todas las pólizas ofrecen las mismas prestaciones y también las particularidades del lugar vacacional. Actualmente, 15 países y regiones exigen a los visitantes un certificado de seguro que incluya de forma explícita, entre otras condiciones, la cobertura de los gastos de asistencia médica por coronavirus.

Coberturas a las que prestar especial atención a la hora de viajar.

• Garantía de anulación: por lo general, debe realizarse antes de incurrir en los primeros pagos a cuenta por reservas, billetes, etc.
• Repatriación ilimitada: en la actualidad está incluida en la mayoría de ofertas aseguradoras, pero hay que comprobar que la cobertura para la repatriación de heridos, enfermos y fallecidos no tenga limitación cuantitativa, por ejemplo, por repatriación en aviones medicalizados.
• Capitales de asistencia sanitaria: es un elemento diferencial entre las ofertas aseguradoras. La sanidad pública no está extendida de la misma manera en todos los países. Hay que comprobar antes de contratarlo que las cantidades que se ofrecen son razonables para el país al que se viaja.
• Cobertura de responsabilidad civil: si se cuenta con un seguro de hogar con cobertura para el contenido, probablemente, se goce de una garantía de responsabilidad civil que alcance daños y perjuicios causados a terceros, también durante el viaje. Sin embargo, si no fuera así, no hay que olvidarse que las indemnizaciones por daños a terceros pueden alcanzar sumas considerables, especialmente en determinados países.
• Exclusiones: en función de las circunstancias personales se debe prestar atención a posibles exclusiones como, por ejemplo, la participación en pruebas deportivas (profesionales o no), edades superiores a los 70, 75 u 80 años, enfermedades crónicas o preexistentes y sus consecuencias o prótesis como audífonos, lentillas, gafas, entre otros.

Autora: Celia García.