Los 6 mejores trucos para convertirte en una persona eco-friendly

El 26 de enero se celebra el Día Mundial de la Educación Ambiental, una efeméride que busca sensibilizar a las personas sobre la delgada línea existente en el equilibrio entre el desarrollo humano y la conservación del medio ambiente.

Todos podemos contribuir a cuidar del planeta incorporando en nuestro día a día ciertos hábitos que nos convierten en personas eco-rresponsables. Ser conscientes de que los recursos de la tierra son limitados, actuar con respeto el medio ambiente y ser sostenibles no solo es beneficioso para la naturaleza, sino que también lo es para nuestra salud y la economía. Estos son seis sencillos hábitos que podemos llevar a cabo desde hoy para convertirnos en personas eco-friendly.

1. Reducir el consumo de plástico. La contaminación por plásticos es uno de los mayores desafíos ambientales del siglo XXI. Cada año se vierten en los océanos ocho millones de toneladas de plástico, lo que equivale a vaciar un camión de basura lleno de plásticos cada minuto. Si no cambiamos de tendencia en 2.050 habrá un volumen de plástico en el mar superior al de los peces. Por ello urge reducir el consumo de plásticos y una de las mejores formas de conseguirlo es teniendo cuidado en nuestras decisiones de consumo: usar bolsas reutilizables, fijarnos en que los productos que compramos utilicen el plástico justo y necesario o preferir los artículos que están envasados en cartón o en vidrio, comprar a granel, o llevar nuestros propios envases de casa.

2. Reflexionar antes de comprar. Uno de los pilares fundamentales para ser respetuoso con el medio ambiente es el consumo consciente. Antes de comprar un producto debemos reflexionar sobre si lo necesitamos realmente. Al adquirir un artículo además de poner el foco en la relación calidad/precio, debemos hacerlo también en criterios sociales y medioambientales, tanto en los productos que compramos como en los recursos que gastamos.

3. Reciclar los residuos que producimos. En España se generan 120 millones de toneladas de basura al año, de los 10.000 millones de toneladas de residuos producidos a nivel mundial. De media cada habitante español desecha 1,3 kilos de basura al día, lo que equivale a 460 kilos de al año. Podemos paliar los efectos que esto produce en el medioambiente reciclando nuestra basura adecuadamente. El proceso de reciclaje conserva los recursos naturales y reduce la sobreexplotación de materias primas protegiendo así los hábitats. Contribuye además a economizar energía ya que los productos reciclados prescinden de varios pasos imprescindibles en el proceso de fabricación. Por ello, debemos deshacernos de las cosas que no nos sirvan reciclándolas en el contenedor adecuado, y si ya no las usamos, intentar venderlas o donarlas para que tengan una segunda vida.

4. Eliminar los productos tóxicos. En nuestro día a día utilizamos muchos productos tóxicos para el medioambiente como artículos de limpieza, desinfección, insecticidas, pinturas y muchos otros. De hecho, estos productos ya contaminan el aire tanto como las emisiones de los vehículos de motor, según un estudio de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA por sus siglas en inglés). El estudio señala que algunos de ellos contienen petróleo, lo cual no sólo perjudica el agua, sino también el aire. Por tanto, debemos identificar los que tengamos en casa que son perjudiciales y sustituirlos por productos naturales que cumplan la misma función.

5. Practicar un turismo sostenible. Es necesario que el turista viaje siendo consciente de que su actividad tiene unos efectos en el entorno natural y humano que pueden ser positivos o negativos. Se puede viajar y seguir disfrutando de esta experiencia sin renunciar a cuidar el planeta y practicar un turismo sostenible que repercute además positivamente sobre la población autóctona, siendo un generador de riqueza y empleo. El viajero “eco” disfruta del turismo intentando que su actividad genere un impacto mínimo sobre el medioambiente.

6. Consumir moda responsablemente. La industria textil es la segunda más contaminante del mundo, según la Organización de las Naciones Unidas (ONU), gasta grandes cantidades de petróleo y de agua. Las tendencias en constante cambio nos impulsan a renovar constantemente nuestro armario y mucha de esa ropa que adquirimos no supera los 6 usos. Lo primero para mejorar en consumo responsable de moda es no comprar a lo loco y optimizar lo que ya se tiene. Poner en práctica el minimalismo y no acumular. Es mejor opción tener poca ropa, pero de buena calidad y elegir productos que respeten el medioambiente y que provengan de tiendas locales. Podemos también mejorar en nuestro consumo responsable de moda informándonos sobre qué compramos, quién hay detrás de la marca, sus políticas de producción, tejidos, etc…

Protegiendo el medio ambiente podremos dejar a las generaciones venideras un entorno saludable. No pensemos solamente en el momento en el que disfrutamos del producto o servicio, también en el antes y el después y en la huella medioambiental que genera.