Cómo disfrutar de unas vacaciones seguras

La pandemia ha aumentado la sensibilidad ante la incertidumbre en general, y con ello, el interés por estar bien asegurados. Si durante 2019 alrededor del 25% de viajeros contrataba un seguro en vacaciones, este porcentaje ha crecido hasta el 60% en 2022. Ahora, somos más conscientes de la importancia de estar protegidos contra determinados riesgos, que además de afectarnos personalmente, pueden suponer un descalabro para nuestros bolsillos.

Estas son las coberturas que no deben faltar para disfrutar de un verano seguro:

Cobertura médica. La Tarjeta Sanitaria de la Seguridad Social da acceso a todos los servicios sanitarios en cualquier parte del territorio nacional. Pero, para recibir asistencia en el resto de la Unión Europea es imprescindible estar en posesión de la Tarjeta Sanitaria Europea. Si sufrimos un ingreso de urgencia fuera de nuestras fronteras (tanto dentro de la UE como en países extracomunitarios) o necesitamos ser repatriados, no estaremos cubiertos si no contamos con un seguro de salud. Por tanto, esta cobertura es una herramienta de protección fundamental durante un viaje, e indispensable cuando se sale al extranjero. Una simple operación de apendicitis o un accidente pueden suponer un gran desembolso de dinero si se viaja sin seguro. En algunos países, el coste de una asistencia sanitaria muy elevado si no se cuenta con la protección de una póliza. Por ejemplo, en Estados Unidos el coste promedio es de más de 70.000 euros, en Turquía más de 60.000 euros, en México más de 28.000 euros, en China unos 27.850 euros, en Marruecos 23.000 euros o en Tailandia 19.000 euros.

Cobertura de robo. En los últimos años los robos en los domicilios y en las vías públicas han aumentado. En España se producen al día una media de 2.500 robos de todo tipo, una cifra que parece no tener techo y que aumenta cerca de un 2% cada año. Por ello, contar con una cobertura de robo supone un gran alivio frente a este tipo de delitos, dentro o fuera del hogar. Los seguros de hogar suelen cubrir los robos, tanto los que se producen dentro de la vivienda como los que podemos sufrir fuera de ella.

Seguro de Accidentes. Los accidentes no se toman vacaciones y nos pueden acompañar allá donde vayamos. El verano pasado 191 personas perdieron la vida en las carreteras españolas. Además, en el destino final también nos podemos encontrar situaciones de emergencia en piscinas, playas, etc. Contar con un seguro de accidentes garantizará un respaldo económico en caso de fallecimiento por accidente, o de incapacidad permanente y absoluta. De esta manera, contaremos con la tranquilidad de disponer de una protección económica que nos ayude a nosotros y a nuestra familia a hacer frente a las necesidades y a los gastos que puedan surgir en caso de sufrir un percance de estas características.

Cobertura de Viaje. Cubre habitualmente pérdida del equipaje, anulación del vuelo, problemas médicos, gastos inesperados de transporte y alojamiento, repatriación… Los seguros de asistencia en viaje deben contratarse siempre antes de la salida y sus coberturas y precios dependerán del destino, así como del tipo de periplo que se va a realizar.

Medidas de prevención en vacaciones

Sea cual sea el destino elegido y las vacaciones soñadas estar asegurados nos dará la tranquilidad necesaria para parar unas vacaciones tranquilas sabiendo que en caso de percance nosotros y nuestras familias estaremos protegidos. Pero como siempre es mejor prevenir que curar desde Avanza Previsión les damos unos consejos a tener en cuenta para tener unas vacaciones seguras:

• Antes del viaje no publicitar que vamos a irnos de vacaciones, a dónde ni los días que vamos a estar fuera. Las redes sociales pueden dar muchas pistas a los amigos de lo ajeno para aprovecharse de esta información en su beneficio.
• Al salir de vacaciones dejar todas las llaves de suministro de la casa cerradas, agua y gas, ya que pueden dar problemas de fugas. Por otra parte, se recomienda dejar también la nevera vacía y todos los equipos electrónicos no esenciales apagados y desconectados.
• Antes de abandonar el hogar comprobar que las puertas y ventanas están bien cerradas. No obstante, también es importante no indicar de manera clara la ausencia, con acciones como no bajar por completo las persianas y únicamente comunicar este hecho a los más allegados.
• No se deben dejar objetos de valor ni dinero en la vivienda. Los vecinos pueden ayudarnos a tener unas vacaciones seguras. Se trata de que eventualmente ronden la casa y estén atentos a ruidos extraños. Si hay suficiente confianza se les puede dejar una copia de la llave para que entren en la casa en caso de que sea necesario.
• Si viajamos en coche unos días antes hay que llevarlo a una revisión para garantizar que todos y cada uno de los componentes del vehículo funcionen adecuadamente y revisar el nivel del aceite del motor, refrigerante y  líquido de frenos. Hay que comprobar el estado de todas las luces y la presión de aire de los neumáticos.
• Ya en carretera, evitar hablar por teléfono al conducir o mirar mensajes en el móvil, así como fumar, la ingesta de bebidas alcohólicas y que todos los que viajan a bordo usen el cinturón de seguridad. Si el recorrido es muy largo, procurar que sean por lo menos dos las personas que conduzcan y si no existe esta posibilidad, se recomienda tomar descansos de por lo menos 10 minutos cada dos horas.
• Una vez lleguemos al destino, en el hotel o apartamento, hay que mantener en un lugar seguro los objetos de valor, dinero y tarjetas de crédito. En los lugares públicos no hay que descuidar el bolso, móvil o cartera, especialmente si están muy concurridos.
• Los cajeros automáticos hay que adoptar ciertas precauciones. Es preferible usar aquellos que se encuentran en el interior de las entidades o de los centros comerciales. Hay que evitar despistarnos y no atender a personas que se ofrezcan a ayudarnos durante la operación y el regreso al domicilio. En caso de observar cualquier tipo de anomalía u objeto extraño en el cajero automático, llamar de forma inmediata al 091.
• Las actividades al aire libre en verano también pueden provocar lesiones deportivas resbalones, caídas o ahogamientos por lo que debemos respetar siempre las zonas delimitadas en nuestras excursiones y estar atentos a posibles imprudencias de los más pequeños, sobre todo en el agua. Llevar un pequeño botiquín en nuestras excursiones nos ayudará a prestar la primera atención de unos percances que en la mayoría de los casos son menores.