Un ambiente laboral con una mala organización del trabajo, presión constante, excesivas exigencias, falta de apoyo, malas relaciones con los jefes y entre los compañeros, así como frustrantes expectativas personales, son factores que pueden afectar a la salud mental en forma de estrés, ansiedad, depresión y otros trastornos psicológicos que aquejan a millones de trabajadores. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que más de 300 millones de personas en el mundo sufren depresión y el estrés laboral se ha convertido en una de las principales causas de absentismo laboral y discapacidad en muchos países.
En España, el 1% de la población trabajadora ha tenido, en los últimos 12 meses, un problema de salud mental (estrés, ansiedad o depresión) causado o agravado por el trabajo, siendo este porcentaje superior entre las mujeres, según refleja una reciente encuesta realizada por el Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (INSST).
Cargas excesivas de trabajo y estrés
El estrés es uno de los factores que más inciden sobre la salud mental y el bienestar de las personas que trabajan. Se trata de un estado de preocupación o tensión que aparece cuando las demandas y presiones derivadas del trabajo son muy elevadas. Si el estrés se mantiene durante un período prolongado de tiempo puede dar lugar a enfermedades mentales (depresión o ansiedad) e incluso llegar a incapacitar para el trabajo. Además, puede también derivar en problemas físicos tales como infartos de miocardio, hipertensión, úlceras gástricas, dolor de cabeza, cuello y espalda, problemas dérmicos y escasa resistencia a las infecciones.
Según el INSST, en España el 32% de los trabajadores está expuesto a presión de tiempo o sobrecarga de trabajo. El siguiente factor ligado a la salud mental más frecuente es el trato difícil con clientes, pacientes, alumnos, etc., al que está expuesta el 16% de la población ocupada.
Una estrategia empresarial inteligente
Los desafíos con respecto al bienestar psicológico en el lugar de trabajo preocupan cada vez más a las empresas, no abordarlos adecuadamente puede tener un impacto significativo en forma de absentismo, disminución de la productividad, alta rotación de personal y mayores costes asociados con la atención médica.
La promoción de la salud mental en el lugar de trabajo no solo es una responsabilidad ética y moral, sino también una estrategia empresarial inteligente. Es un hecho demostrado que invertir en la salud mental de los trabajadores no solo beneficia a los individuos, sino que también contribuye a la buena marcha y al éxito empresarial. Al priorizar el bienestar psicológico de los empleados, las organizaciones pueden mejorar la moral, aumentar la productividad y construir una cultura corporativa sólida y positiva. Un ambiente de trabajo saludable y que promueva la salud mental de los empleados es esencial para una organización que quiera tener éxito a largo plazo.
Estas son algunas de las prácticas que pueden ayudar a fomentar un entorno laboral saludable en el trabajo:
Fomentar el equilibrio entre trabajo y vida personal. Promover prácticas como horarios flexibles, teletrabajo y tiempo libre remunerado puede ayudar a los empleados a equilibrar sus responsabilidades laborales con su vida personal, lo que reduce el estrés y mejora el bienestar general.
Promover un ambiente de trabajo positivo. Reconocer y celebrar los logros, fomentar el trabajo en equipo y crear un ambiente donde se sientan valorados y respetados los trabajadores.
Implementar políticas y procedimientos claros. Establecer políticas claras relacionadas con el manejo del estrés, el acoso laboral y la discriminación ayuda a prevenir y proporcionar a los empleados un marco claro para abordar cualquier problema que puedan enfrentar.
Fomentar la apertura y la comunicación. Es crucial que los empleados se sientan cómodos para hablar sobre sus problemas sin temor a represalias. Esto implica crear una cultura de apertura y comprensión donde se fomente la comunicación honesta y se brinde apoyo cuando sea necesario.
Proporcionar recursos y capacitación. Las organizaciones pueden ofrecer recursos como programas de asesoramiento, sesiones de capacitación sobre manejo del estrés y técnicas de autocuidado para ayudar a los empleados a manejar mejor sus problemas de salud mental.
Test: ¿Cómo de saludable es tu entorno laboral?
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